Ciencia y sociedad, Tercera Cultura, Traducciones
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¿Un pacto fáustico?

Los parsi están en extinción. Esta gente de la parte occidental de India, originales de Irán y famosos por su papel en el comercio, la ciencia, y la industria, podrían desaparecer para mediados de este siglo, habiendo ya caído de 114.890 en 1941 a 69.011 en 2001. Las muertes superan los nacimientos en una proporción de casi tres a uno.

¿La causa es una calamidad? ¿la guerra? ¿un desastre natural?

Boda parsi. Wikimedia commons

Boda parsi. Wikimedia commons

Nada de eso. Simplemente no tienen suficientes hijos. Hacia 1980-82 la tasa de fecundidad parsi se había desplomado hasta los 1.12 niños por mujer, una cifra que en apariencia tocaba fondo. Hacia 2001 era de 0.89. Hoy, muy pocas mujeres están en edad reproductiva. Sólo una de nueve familias tiene un niño por debajo de diez años (D’Silva, 2013).

Las cosas no siempre han sido así. La fecundidad parsi bajó por debajo del nivel de dos niños por mujer sólo en los años sesenta. En aquel tiempo, el declive parecía normal: con la modernización, más niños llegan a vivir como adultos, por lo que se necesita que nazcan menos. Y sin embargo la tasa de fecundidad continuó bajando y bajando. Claramente, había otras razones para el declive.

Una razón es la elevación constante de lo que significa estar “preparado para el matrimonio”. Para los parsi de hoy, sólo estás “preparado” cuando posees una licenciatura universitaria, tienes un trabajo bueno y estable, y puedes comprar tu propia casa. Esto significa llegar a la treintena, cuando la fecundidad ya está declinando. Otra razón es que el 30% de la comunidad nunca se casa (Brara, 2013). Algunos hombres se quejan de que es imposible saltar todos los obstáculos que parece dictar el matrimonio. Se dice que las mujeres parsi tienen expectativas poco realistas y son demasiado caras de mantener, con el resultado de que un número creciente de hombres parsi se casan fuera de la comunidad. Otros simplemente prefiere el estilo de vida soltero.

Detrás de estas razones específicas descansa una razón más amplia: la occidentalización. Hace más de un siglo, los parsis adoptaron los valores occidentales de forma entusiasta: la emancipación del individuo, la sumisión a las expectativas de la economía de mercado y, a la inversa, una pérdida gradual de objetivos y prioridades colectivas. Este era el camino hacia la riqueza, y parte del trato se ha cumplido. Los parsis se hicieron más ricos, pero a un precio –la desintegración gradual de la familia y otros apoyos tradicionales para la supervivencia del grupo. El pacto es cada vez más “fáustico”.

Los parsi no están solos

Otras gentes han escogido el mismo camino. Las primeras fueron aquellas del noroeste europeo, que parecen haber experimentado una fuerte tendencia hacia el individualismo y un parentesco debilitado (Hartman, 2004; Macfarlane, 1978; Seccombe, 1992). En ese momento estaban mejor posicionadas para liberarse a sí mismos de los límites del parentesco y organizar sus relaciones sociales y económicas de forma diferente, en torno a las líneas que desarrollaría la economía de mercado. Con el fin de la Edad Oscura, los europeos del noroeste comenzaron a seguir esta trayectoria de evolución cultural, avanzando más y más en la dirección del liberalismo, el mercantilismo y la autonomía personal. Los beneficios fueron enormes, en unos pocos siglos, pasaron de ser semi-bárbaros en los bordes de la civilización a convertirse en los señores de la tierra. Y este impresionante incremento en poder geopolítico corrió paralelo con un impresionante incremento de la riqueza y el conocimiento científico. Los beneficios fueron tan impresionantes que muy pocas personas pensaron en los costos, o en el punto y final de la completa atomización social.

Otras gentes observaban, con admiración. La occidentalización parecía el secreto del éxito. En el siglo XIX, los judíos askenazís la abrazaron con el fervor de los nuevos conversos, empleando la Yiddishkeit como vehículo para difundir las ideas de la Ilustración –progreso, libertad y autonomía personal. Los japoneses se convirtieron durante la restauración Meiji, rechazada en los años 30, pero completaron el trabajo bajo la tutela de los Estados Unidos. En Rusia, la revolución bolchevique comenzó como un esfuerzo para acelerar la occidentalización, aunque más tarde cambió su curso bajo la presión de la autarquía y el miedo a occidente. En los años 90, con el fin del comunismo, Occidente se convirtió una vez más en el modelo a seguir.

Hoy, los judíos norteamericanos no ortodoxos poseen una tasa de fecundidad de tan sólo 1.3 hijos por mujer. Similares caídas de la fecundidad han ocurrido en otras partes, especialmente donde el colectivismo ha dado paso rápidamente al individualismo: Japón, Rusia, España, Alemania, Italia… la cultura moderna occidental es tóxica para la formación de la familia en la mayoría de las sociedades, pero sus efectos parecen ser más tóxicos en unas que en otras.

Diríamos que es triste pero inevitable, ¿No? Sólo si pensamos que la modernidad occidental es inevitable. En los últimos años, tanto Israel como Rusia han dado la vuelta espectacularmente a su fecundidad en declive, aunque continúan siendo sociedades modernas (Goldman, 2013; Karlin, 2014). Los incentivos económicos han sido un factor. Pero los cambios claves realmente tienen que ver con el reino de la cultura y la ideología, particularmente con el esfuerzo de establecer un nuevo equilibrio entre el individuo y la colectividad. Y por colectividad, no me refiero a las estructuras artificiales del estado, la ideología y la lealtad corporativa. Me refiero a las estructuras naturales de la familia, los amigos y la familia, y la etnia. Estas son las bases para el tradicionalismo posmoderno, incluyendo la parte del mundo donde comenzó la modernidad occidental.

¿Hay esperanza para los parsi?

¿Pero qué pasa con los parsis? Por ahora, la pioridad es hacer tiempo. El gobierno indio, para su reconocimiento, se ha embarcado en un proyecto ambicioso para elevar la fecundidad de los parsi a través de fertilización in vitro e incentivos para que las personas se casen antes. En las palabras del ministro para asuntos de las minorías K. Rahman Khan: “Este es un pequeño paso para pagar la deuda a la comunidad parsi por su contribución al país. No nos podemos permitir perder esta comunidad” (D’Silva, 2013).

Dar la vuelta al declive de la fecundidad será como apartar al Titanic del iceberg. Las tendencias actuales están perdiendo fuerza. Más aún, toda inversión de tendencia requerirá no sólo incentivos económicos sino también cambios en el más amplio ambiente ideológico y cultural, que se sustenta en su mayor parte fuera de la India y está centrado en el mundo occidental. Rusia e Israel son lo bastante grandes como para sostener sus propias culturas, pero este no es el caso de los parsi. A no ser que quieran ser como los amish o los judios jasídicos, bloqueando la cultura moderna occidental tanto como sea posible, deberán encontrar algún otro camino.

Si es que hay un camino.

Referencias

Brara, S. (2013). While there’s still time, The Hindu, October 17 http://www.thehindu.com/news/cities/Delhi/while-theres-still-time/article5240683.ece

D’Silva, J. (2013). Can India save its Parsi community with assisted reproduction? BMJ, 347:f7530 http://www.bmj.com/content/347/bmj.f7530.full?ijkey=vwHjjYILTGR9EDf&keytype=ref

Goldman, D.P. (2013). Israel’s demographic miracle, InFocus Quarterly, 7 (spring)http://www.jewishpolicycenter.org/4058/israel-demographic-miracle

Hartman, M.S. (2004). The Household and the Making of History. A Subversive View of the Western Past, Cambridge: Cambridge University Press.http://books.google.ca/books?hl=fr&lr=&id=Ynta0T8XCXgC&oi=fnd&pg=PR9&dq=%22household+and+the+making+of+history%22&ots=RKOGFT0iX3&sig=yJCKWta8-HpHsyfn1eLaCmbe26A

Karlin, A. (2014). The “normalization” of Russia’s demographics, The Unz Review, November 25 http://www.unz.com/akarlin/normalization-of-russias-demographics/

Macfarlane, A. (1978). The Origins of English Individualism: The Family, Property and Social Transition, Oxford: Blackwell

Parsinustan-ne Kahanis. (Stories from Parsi homeland)https://www.google.ca/url?sa=t&rct=j&q=&esrc=s&source=web&cd=1&cad=rja&uact=8&ved=0CB0QFjAA&url=https%3A%2F%2Fzoroastriansnet.files.wordpress.com%2F2012%2F11%2Fvignettes-from-parsi-history-prospect-what-if.doc&ei=Dm_KVLCiLpKvyQSY7oGYCg&usg=AFQjCNEep6ipJOFicQXSgHBu7hdb6cz0QA

Seccombe, W. (1992). A Millennium of Family Change. Feudalism to Capitalism in Northwestern Europe, London: Verso. http://books.google.ca/books?hl=fr&lr=&id=MiTxtZI-pzUC&oi=fnd&pg=PP13&ots=E-rMsM8u-P&sig=ifA6uDqYFLomOGQwyBfNfrDKTpw#v=onepage&q&f=false

 Publicado en The Unz Review

33 Comentarios

  1. Clavius says

    Uy, uy, uy… Realidades incómodas a la vista.

    Solo un par de críticas constructivas a la traducción, si se me permite la insolencia:

    Es esta la causa de una calamidad? ¿De la guerra? ¿De un desastre natural?

    Una mejor traducción del original sería:

    Qué ha causado esta calamidad? ¿La guerra? ¿La enfermedad? ¿Un desastre natural?

    O bien:

    ¿Qué ha causado esta calamidad: la guerra, la enfermedad, un desastre natural?

    Existe una pérdida de fuerza detrás de las tendencias actuales.

    Una traducción más adecuada sería:

    Hay una fuerte inercia detrás de estas tendencias actuales a la baja.

  2. Clavius says

    Vaya, me he dejado un signo de interrogación por el camino, y eso canta mucho cuando estás corrigiendo a otros.

  3. Sí, había algún fallo en la traducción que estoy intentando corregir.

  4. teresa says

    Con la globalización eso es inevitable. La cuestión es qué grupos pueden suplantar a otros y cuál aparenta ser el coste.

  5. idea21 says

    No hay que ser catastrofistas. La disminución de natalidad entre los grupos más desarrollados culturalmente va pareja precisamente al progreso social que estas minorías encarnan y que repercute en toda la comunidad. A medio plazo, las mismas tendencias se extenderán también a quienes ahora tienen mucha prole. Por lo demás, el mundo ya está bastante superpoblado…

    Y antes de que el descenso de la población pueda llegar a ser alarmante (y eso llevaría mucho tiempo…) seguramente se habrán producido más cambios sociales.

  6. Masgüel says

    «Tradicionalismo posmoderno»

    Ya. Andrei Rublev.
    https://www.youtube.com/watch?v=O6C9x0uK86I
    En Rusia el tradicionalismo es la máscara y el instrumento de un oligopolio. Pretender un freno ideológico a la occidentalización es tan voluntarista como la cooperación perfecta de Idea21. La occidentalización es un coche con el freno roto y arrastra todo lo que la toca. La tecnociencia es un purasangre entre mulas. La utilización de la tradición como bandera política solamente es la manera de ganarse los votos de los que asusta el cambio social, con una bolsa electoral enorme entre jubilados y analfabetos funcionales. Así que tanto da usar la hoz y el martillo como la cruz ortodoxa.
    https://www.youtube.com/watch?v=M0nphMY0bkE
    En dibujos animados tiene gracia. Gobernando un país, ninguna.

    Todos los fenómenos culturales son el presente de una tradición. Las tradiciones cambian y en todas partes están cambiando a un ritmo inaudito. Tiene consecuencias claro. Pero no hay quien las pare. Ni me parece deseable. Repito las palabras de Haidt: «My conclusion is not that secular liberal societies should be made more religious and conservative in a utilitarian bid to increase happiness, charity, longevity, and social capital. Too many valuable rights would be at risk, too many people would be excluded, and societies are so complex that it’s impossible to do such social engineering and get only what you bargained for. My point is just that every longstanding ideology and way of life contains some wisdom, some insights into ways of suppressing selfishness, enhancing cooperation, and ultimately enhancing human flourishing.»

  7. Masgüel says

    Y en Israel, entre los ultraortodoxos y los que votan con la mirada puesta en los cohetes de Hamas, el nacionalismo se las va apañando, pero mandan a sus hijos a estudiar a California. En un mundo con buques portacontenedores y satélites artificiales, las fronteras, cada vez más, son rayas en un papel.

  8. Eduardo says

    El test definitivo para las ideas multiculturales, y la actual ocurrencia europea de que es positivo destruir las identidades nacionales, se presentará cuando la gente de ascendencia europea sean una minoría en sus propios países. Y es simplemente lo que indican algunas proyecciones demográficas. Quizás sea cierto que la modernización es un coche sin frenos.

    Un test fiable e interesante es el corte progresivamente étnico del voto en los países grandes de nuestro entorno. Gran Bretaña:

    «Rather than London versus the rest, we may see a widening cleft between White British and minority voters which cuts more strongly through the capital than anywhere else.»

    http://quarterly.demos.co.uk/article/issue-5/ukip-in-london/

    Los «politólogos», psicólogos sociales y gente aferrada en general a la fe en El Progreso seguirán negándolo hasta la extenuación, o bien alegando malevolencia en los oponentes, pero una medida tan empírica como el mismo comportamiento de voto, por citar sólo un factor, sigue indicando que la revolución, la globalización y el mercado competitivo no han hecho que los «intereses genéticos» de los grupos étnicos desaparezcan por arte de magia.

    http://www.bbc.com/news/uk-politics-18519395

  9. Eduardo says

    También habría que precisar que Frost distingue entre «occidentalización» y «modernización». Cree que es posible una modernidad libre de los peores vicios occidentales. Eso está bastante en línea con Haidt.

  10. Masgüel says

    «Cree que es posible una modernidad libre de los peores vicios occidentales.»

    En eso consiste el voluntarismo de Frost y de los neoreaccionarios. Los peores vicios occidentales se contagian como la gripe. A todas las razas les gusta el azucar.

  11. idea21 says

    «Pretender un freno ideológico a la occidentalización es tan voluntarista como la cooperación perfecta de Idea21»

    Por alusiones: yo no promuevo «el voluntarismo». Es un hecho demostrado que las mejoras en la cooperación se dan por la evolución cultural y la evolución cultural determina siempre el comportamiento de los individuos. El elemento voluntarista de cualquier cambio cultural es siempre mínimo, como sucede con las invenciones tecnológicas de cualquier tipo.

    Lo que es un voluntarismo es taparse los ojos y los oídos antes los argumentos que no nos interesan por motivos personales.

    «la actual ocurrencia europea de que es positivo destruir las identidades nacionales»

    No es una ocurrencia actual. La misma idea del humanismo (y en realidad, el universalismo cristiano)implica la desaparición de esas identidades antisociales. Sin embargo, lo políticamente correcto del buenismo europeo actual no va en ese sentido precisamente: ahí está el fomento de las identidades de las regiones de Europa, de las identidades étnicas de los inmigrantes o de minorías antiguas como los gitanos. Todos reciben aliento y subvención de las instituciones estatales europeas.

  12. Masgüel says

    Las identidades nacionales no son antisociales. Solo están quedando obsoletas a marchas forzadas. Pero estoy de acuerdo en que las identidades étnicas, nacionales, religiosas y culturales, también las autóctonas o mayoritarias, aprendan a defenderse solas, sin ayudas del estado. Si no pueden será porque no han conseguido atraer a nadie y merecerán pasar a los libros de historia. Las instituciones estatales y la organización de las relaciones económicas siempre será un legado de la cultura occidental, pero a diferencia de Frost, creo que las diferencias genéticas entre poblaciones es un factor irrelevante para la difusión de ese andamiaje institucional a todos los rincones del globo. En todas partes adquiere un sabor local, pero la retórica de legitimación de todos los gobiernos empieza a sonar igual en todas partes. El gobierno chino dirá que respeta los derechos reconocidos en la Carta de las Naciones Unidas, aunque lo haga. Dirá que las democracias liberales son una patraña orquestada por las empresas que cotizan en Wall Street. Pero no atacará la ideología que defiende los derechos humanos o la sobernía popular, porque sabe que los jóvenes en Shanghai también compran smartphones, ven Game of Thrones y han pasado los últimos meses mirando hacia Hong Kong.

  13. Masgüel says

    Cuando digo el gobierno chino, me refiero a sus voceros extraoficiales, como Eric X. Li. Son buenos diplomáticos, Mucho más sofisticados que los rusos.

  14. Eduardo says

    «Las instituciones estatales y la organización de las relaciones económicas siempre será un legado de la cultura occidental, pero a diferencia de Frost, creo que las diferencias genéticas entre poblaciones es un factor irrelevante para la difusión de ese andamiaje institucional a todos los rincones del globo.»

    Esto es a grandes rasgos lo mismo que pensaban los misioneros cristianos cuando decidieron extender sus creencias por «todos los rincones del globo». Siglos después, sigue existiendo una fuerte correlación entre las distintas religiones mundiales y las fronteras etnonacionales. Europa a grandes rasgos es cristiana o poscristiana, el mundo árabe es musulmán, y Oriente es budista y confucionista. El cristianismo está extendido en Africa, pero en medio del sincretismo animista. La única excepción significativa es el auge del cristianismo (protestante) en China, pero es una tendencia demasiado repentina y reciente para sacar grandes conclusiones.

  15. Eduardo says

    Los neorreaccionarios no son «voluntaristas». Por lo menos Frost ha hablado otras veces de la locura imparable de la ideología. Simplemente constata que de hecho hay otras formas de «modernidad».

  16. Masgüel says

    Los misioneros cristianos no lograron extender sus creencias porque fueran especialmente convincentes, sino por las telas, cuchillos y espejos que llevaban en las alforjas. Y porque no muy lejos habría soldados a caballo.

    Hoy la difusión de ideas depende de unas pocas empresas que cruzan cables de fibra óptica en el fondo de los océanos. Enciende el ordenador y la guerra está ganada. Como decía John Barlow cuando publicó la «Declaración de independencia del ciberespacio», ya no estamos gritando «Let my people go». «We’re already gone, dude».

  17. Eduardo says

    Bueno, si lo dice la «declaración de independencia del ciberespacio», me callo.

  18. Masgüel says

    Es una chorrada, pero prendió como la pólvora.

  19. idea21 says

    «Las identidades nacionales no son antisociales.»

    En tanto que la mayoría de las guerras tienen su origen en las identidades nacionales (sesgo endogrupo/exogrupo) más bien parece muy discutible esa afirmación.

    «estoy de acuerdo en que las identidades étnicas, nacionales, religiosas y culturales, también las autóctonas o mayoritarias, aprendan a defenderse solas, sin ayudas del estado. Si no pueden será porque no han conseguido atraer a nadie y merecerán pasar a los libros de historia.»

    A lo largo de la historia las identidades nacionales han requerido siempre del apoyo político. La falta de apoyo estatal estaba haciendo desaparecer la identidad nacional en Cataluña y el País Vasco (a pesar de que, por ejemplo, se publicaban libros en catalán legalmente durante el franquismo, y que también durante el franquismo siguió operando la academia de la lengua vasca). El cambio político permitió impulsar de nuevo el sentimiento de identidad nacional desde las instituciones del estado.

    La idea de que la identidad nacional puede mantenerse a lo largo de generaciones sin apoyo político parece poco creíble. Y eso no tiene que ver con defenderse de persecuciones ni nada por el estilo, sino simplemente porque existe una tendencia natural de desarrollo social hacia identidades nacionales políticamente más poderosas.

    «Los misioneros cristianos no lograron extender sus creencias porque fueran especialmente convincentes, sino por las telas, cuchillos y espejos que llevaban en las alforjas. Y porque no muy lejos habría soldados a caballo.»

    Sin embargo, el cristianismo triunfó en el Imperio Romano en dura competencia con la religión estatal y con muchas otras religiones orientales que pugnaban por el predominio. Solo cuando demostró ser la más competitiva el poder político decidió apoyarse en ella.

    Por supuesto el caso concreto de la rápida expansión de las religiones de los colonizadores se basa en factores de poder político. Sin apoyo político, el cristianismo necesitó tres siglos para imponerse en Roma. El Islam se impuso en Egipto, Mesopotamia y Asia Menor en apenas una generación gracias al poder estatal. Pero no olvidemos que también hubo conquistadores que abandonaron sus propias religiones, sustituyéndolas por las de los vencidos (los godos o los mongoles, por ejemplo).

  20. Masgüel says

    https://www.youtube.com/watch?v=JfsfZQniIOE
    dijo el nacionalista.

    “Todos nos sentíamos ebrios de felicidad durante aquellos primeros años, especialmente los jóvenes. Eran los primeros años del Redescubrimiento del Hombre, cuando la Instrumentalidad hurgaba entre los tesoros para reconstruir las viejas culturas, los viejos idiomas e incluso los viejos problemas. La pesadilla de la perfección había llevado a nuestros antepasados al borde del suicidio. Ahora, bajo el liderazgo del Señor Jestocost y la Dama Alice More, las antiguas civilizaciones emergían del océano del pasado como grandes masas continentales.
    Yo fui el primer hombre que pegó un sello en una carta, después de catorce mil años. Llevé a Virginia a oír el primer recital de piano. Los dos miramos en la máquina óptica cómo se liberaba el cólera en Tasmania, y cómo los tasmanos bailaban en las calles, pues ya estaban libres de toda protección. Por todas partes cundía el entusiasmo. Por todas partes hombres y mujeres trajinaban con empecinada voluntad para construir un mundo más imperfecto.
    Yo mismo entré en un hospital y salí convertido en francés.”

    Alpha Ralpha Boulevard – C. Smith

    Quizá tenga sentido ponerse folclórico, cuando nos aburramos de no tener problemas, dentro de catorcemil años.

  21. Masgüel says

    Contrapunto

    «I know the evil of my ancestors because I am those people. The balance is delicate in the extreme. I know that few of you who read my words have ever thought about your ancestors this way. It has not occurred to you that your ancestors were survivors and that the survival itself sometimes involved savage decisions, a kind of wanton brutality which civilized humankind works very hard to suppress. What price will you pay for that suppression? Will you accept your own extinction?.»

    God Emperor of Dune – Frank Herbert

  22. Vellana says

    «Hoy la difusión de ideas depende de unas pocas empresas que cruzan cables de fibra óptica en el fondo de los océanos. Enciende el ordenador y la guerra está ganada.»
    ¿Y en Francia quién la gana, el ISIS o Le Pen?
    Un cordial saludo.

  23. Masgüel says

    «¿Y en Francia quién la gana, el ISIS o Le Pen?»

    Ambos se alimentan de la frustración y reacción impotente del conservadurismo ante la inevitabilidad del cambio. Son muy peligrosos, pero están condenados. Al Qaeda hace propaganda en internet, pero Bin Laden coleccionaba pornografía digital. La misma estructura de internet impide evitar que cada punto de acceso la use para sus propósitos. Hace imposible el control centralizado y el poder para imponer reglas. Los protocolos, abiertos o cifrados, son obra de personas concretas, pero su implantación depende del consenso implícito de cada usuario, al conectarse con una máquina que los utiliza. Internet es una tecnología inherentemente libertaria.

    http://www.oei.es/salactsi/winner.htm

  24. Vellana says

    «Son muy peligrosos, pero están condenados.» Me recuerda «El fin de la Historia».
    El comunismo estaba condenado y duró 70 años.
    La Edad Media estaba condenada y duró 1000 años.
    La Iglesia estaba condenada y llevamos 2000 años.
    Estas condenas están dictadas, pero nadie las ejecuta.

    http://es.globalvoicesonline.org/2015/01/20/la-policia-china-esta-comprando-software-espia-y-publicando-sus-ordenes-de-compra-en-linea/
    Si piensas que ciudadanos particulares son capaces de superar las capacidades de estructuras centralizadas para ocultar sus actividades, me temo que te equivocas. Quizás tú lo seas, a un coste evidente, y es que dedicas parte de tu tiempo a ello.
    «Enciende el ordenador y la guerra está ganada.» Sí, la gana el PCCh.

    Pensar que porque haya esta o aquella tecnología de transmisión de la información no se van a transmitir y aceptar ideologías de corte totalitario, o que quienes las quieren imponer no van a usar esas tecnologías u otros medios para conseguirlo es tener mucha fe en una imagen ideal del ser humano. Me temo que proyectas sobre la humanidad el entorno en que te mueves.
    Un saludo.

  25. El idealismo de Masgüel lo conduce a saltarse todos los obstáculos que se le pongan por delante sin despeinarse y a afirmaciones tan rotundas como esa estructura libertaria que constituiría la red. Su optimismo, sin embargo, dista mucho de hacerse contagioso. El mundo no es una idea que camina hacia su autorrealización.

  26. Masgüel says

    El mundo no es una idea que camina hacia su autorrealización, pero en el mundo abundan las ideas con ganas de realizarse. Ese es el juego.

    Diría que no solo mi optimismo es contagioso. Es un caso de contagio. Ser optimista o cenizo respecto al cambio a menudo es una cuestión generacional. El mito del progreso goza de excelente salud. El cambio es inevitable, pero yo no creo que el cambio esté destinado a satisfacer mis preferencias. Una guerra mundial podría empezar mañana. Pero no es el mismo mundo donde matamos con drones que el que mundo en que matábamos a pedradas. No es el mismo mundo donde hacíamos cuentas sobre tablillas de barro que un mundo con logaritmos para automatizar los la compraventa de acciones bursátiles. Las tecnologías no son neutras. Como señala Winner en el artículo que enlazo arriba, a menudo tienen características políticas inherentes y lo idealista es pensar que podemos usarlas para nuestros propósitos sin tener en cuenta que su uso cambia nuestros propósitos.

  27. «Una guerra mundial podría empezar mañana. Pero no es el mismo mundo donde matamos con drones que el que mundo en que matábamos a pedradas.»
    Dejando al margen que en el mundo de las pedradas no había guerras mundiales, no sé qué habría que celebrar en esa guerra que se mata con drones. Se puede ser joven en edad pero muy viejo en pensamiento, y un idealismo como el tuyo a lo que te conduce es a la mitología no a la modernidad. Lo importante en cualquier caso a mi entender no es solo el destino sino el viaje. Lo otro es el niño que quiere el caramelo pero no sabe cómo conseguirlo. La modernidad de la que hablas es vacía posmodernidad. No debieras olvidar que el optimismo también puede ser bobalicón.

  28. Masgüel says

    Sea. Me chupo el dedo.

    Para las consecuencias de la narrativa neoliberal y sus simplezas, mejor el último documental de Adam Curtis:

  29. Masgüel says

    Los conservadores de izquierda y derecha son igual de apocalípticos. La aventura neoliberal ha terminado en fracaso rotundo. El anarcocapitalismo no ha sido más que literatura para misántropos con ínfulas de grandeza. Y ni siquiera es buena literatura. Lo que convence por doquier son dos formas de capitalismo. El socioliberalismo occidental, de vocación globalista (un mercado, un estado) y la dictadura china. Ambos ofrecen crecimiento económico, pero los chinos se han dado cuenta de que prestar dinero y construir infraestructuras para otras dictaturas, mantenerlas a flote, además de negocio, es una oportunidad para erosionar la expansión del liberalismo político. Sin el apoyo de China, Rusia colapsa (hace cincuenta años era al revés). De puertas adentro, tanto el modelo occidental como el chino pierden legitimidad cuando llegan vacas flacas. Pero solo el chino la pierde incluso cuando vienen gordas. Porque el liberalismo es enfermedad de ricos y el miedo al extranjero desaparece cuando llega con un pan debajo del brazo. Pese a quienes anuncian y prefieren una guerra perpetua a ver cumplidas las esperanzas de su adversario, todo el mundo se está occidentalizando. China también. Es una estupidez pretender acelerarla a cañonazos (aunque puntualmente sean necesarios). Cuece en su propio jugo. Un planeta WEIRD. ¿Qué miedo, eh?.

  30. Berto says

    Hay un aspecto que no se recoge entre las causas del declive de estos zoroatristas: el aumento de enfermedades por la consanguinidad. Parece que tienen un elevado nivel de enfermedades genéticas al casarse entre ellos.

  31. Ouroboros says

    «Hay un aspecto que no se recoge entre las causas del declive de estos zoroatristas: el aumento de enfermedades por la consanguinidad. Parece que tienen un elevado nivel de enfermedades genéticas al casarse entre ellos.»

    No tengo constancia de eso, pero es cierto que el «efecto fundador» o un número reducido de miembros en una cierta area geográfica ha golpeado a ciertos grupos aumentando la frecuencia de enfermedades genéticas raras (quebequeses, amish, judíos ashkenazis…) pero estos efectos negativos -trágicos para el individuo y la familia- no podrían suponer nunca por sí mismos un problema a nivel de población (a no ser que estuvieran añadiendo el matrimonio sistemático entre primos cercanos, en primer y segundo grado). Su problema es cultural y estructural. Aún tienen cifras suficientemente grandes como para escapar sin la menor dificultad a un cuello de botella genético. De sobra. Mucho más preocupante es el reducido número de mujeres en edad de procrear.

    De hecho, mientras que la consanguinidad extrema es devastadora para la fertilidad, la consanguinidad leve se ha demostrado como favorecedora de la misma (y en diferentes especies) aunque en el caso humano hay discusiones respecto al porqué y el cómo:

    http://isteve.blogspot.com/2008/02/darwinian-sweet-spot-3rd-cousin.html

    De hecho y como se puede extrapolar de lo que se señala en ese mismo enlace, históricamente y para buena parte de la Humanidad no debe de haber sido fácil evitar un matrimonio con un «primo» en tercer o cuarto grado. Imáginemos todas las sociedades agrícolas o seminomádicas, de movilidad y extension geográfica limitadas, con cifras de población bajas y con natalidad elevada. Mírese la tabla. En dos o tres generaciones resultaría muy frecuente casarse con un «primo» sin siquiera saberlo.

    Y eso suponiendo que en esas sociedades se haya querido evitar dichos matrimonios y no estemos ante uno de los numerosísimos grupos, tanto presentes como pasados, que favorecen activamente el matrimonio con primos porque para su entorno los perjuicios asociados a una consaguinidad mayor se ven sobrepasados por los beneficios: mantener bienes dentro de la familia, disponer de grandes clanes familiares para la ayuda o defensa mutua, etc. Se cree que un 50% de la Humanidad lo practica.

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