Divulgación Científica, Ética animal, Tercera Cultura
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Nuestros carnívoros antepasados

Homo ergaster

Es posible que se haya prestado una atención insuficiente al papel de las madres en la evolución humana, pero cuando estudiamos la importancia de la dieta en el proceso de humanización, no hay contradicción entre madres y cazadores. Según Ella Psouni, del departamento de psicología de la universidad de Lund, en Suecia, existe de hecho una “fuerte conexión entre la dieta y el amamantamiento”. Las diferencias en el tiempo de destete entre los humanos y los simios no es cultural sino biológica. Nuestro precoz destete se debe a que los sapiens son carnívoros cazadores capaces de aportar una dieta más energética, a diferencia de gorilas, chimpancés u orangutanes, que son omnívoros o herbívoros. Un estudio con 67 especies de mamíferos, publicado en PLoS, documenta que las diferencias en el destete temprano se deben principalmente a esta dieta carnívora.

Es más. La caza y la dieta carnívora no sólo desempeñaron un papel crucial en la evolución humana, probablemente también pudieron tener un impacto devastador en los ecosistemas. Según Lars Werdelin, del museo de historia natural sueco, la decadencia de los grandes carnívoros africanos probablemente se debe al impacto de los primeros homínidos más que al cambio climático. Aunque la hipótesis no es segura, ya que los primeros Homo llevaban ya medio millón de años antes de la decadencia de los grandes carnívoros (se estima que los primeros Homo capaces de emplear herramientas datan de hace 2.6 millones de años, aunque otros estudios retrasan mucho más la invención de las primeras herramientas y el carnivorismo homínido) el hecho es que, de los 18 grandes carnívoros que ocupaban el paisaje africano hace 2 millones de años, hoy sólo quedan 6 especies de más de 21.5 kg. (leones, leopardos, dos especies de hienas, guepardos y perros salvajes).

Teniendo en cuenta la importancia del consumo de carne en la evolución humana, cabe preguntarse si puede extraerse alguna conclusión moral o dietética de la historia de nuestra humanización. ¿Es moral comer carne? ¿Sigue siendo positiva para nuestra salud una dieta basada en la carne? Muchos no dan la respuesta positiva por descontada. La misma Ella Psouni advierte que las conclusiones de su investigación no dicen nada sobre si debemos o no comer carne para tener una dieta adecuada. Y según el animalista Oscar Horta “no hay razón alguna para creer que lo que hiciesen nuestros antepasados homínidos hace cientos de miles de años pueda ser relevante para nuestra consideración actual sobre cómo hemos de actuar”. Sea cual sea nuestra preferencia moral, parece imprescindible situar la discusión en un marco más amplio. Aunque de todos modos es instructivo saber de dónde venimos.

33 Comentarios

  1. David says

    «Los animales carnívoros comen mucha carne pero no han desarrollado su inteligencia a nivel humano. La teoría de que comer carne contribuyó de forma esencial a que fuéramos inteligentes no es unánimemente aceptada. Por ejemplo, el genetista Stephen Oppenheimer se pregunta por qué los carnívoros por antonomasia, como los leones o la hienas, no han desarrollado una inteligencia como la nuestra (Oppenheimer, 2004). Oppenheimer observa que «para establecer una conexión directa entre dieta carnívora, empeoramiento del clima y crecimiento encefálico necesitaríamos hacer comparaciones con primates exclusivamente vegetarianos del mismo entorno y del mismo período». Como no tenemos cráneos fosilizados de primates no homínidos de menos de ocho millones de años de antigüedad, es fácil ver las dificultades a las que nos enfrentamos a la hora de establecer hipótesis en torno a los factores que desencadenaron el gran aumento del tamaño del cerebro.

    En fin, ¿por qué creció nuestro cerebro y no el de otros carnívoros por excelencia? Se ha respondido que el aumento del cerebro se pudo deber al carácter social de los primates, pero: “el cerebro del aye aye tiene, con mucho, el mayor tamaño relativo encontrado entre los prosimios, con un valor próximo a la media de los primates no prosimios. Pero posee hábitos solitarios, de modo que la complejidad social no puede explicar su cerebro sobresaliente” (Martin, 2000).

    Por otra parte, no todos los científicos están de acuerdo en que el cerebro humano no haya hecho otra cosa más que crecer en los últimos dos millones y medio de años. Robert D. Martin afirma que: “cada vez hay más pruebas de que el cerebro de los componentes de nuestra propia especie Homo sapiens era antes mayor que ahora”, concluyendo que “los cambios de mayor trascendencia para la sociedad humana han ido acompañados de un descenso progresivo de nuestro tamaño cerebral” (Martin, 2000).

    Además, la hipótesis del surgimiento de la inteligencia por consumo de carne representa un razonamiento circular. Según esta hipótesis, el consumo de grandes cantidades de carne sería posible gracias al hecho de tener unos cerebros voluminosos que permitirían tener el mínimo de inteligencia para poder fabricar las herramientas que posibilitarían descuartizar y descarnar los restos de grandes animales. Pero no hay que olvidar que el presupuesto básico de esta hipótesis es que los grandes cerebros se consiguen tras consumir carne. En definitiva: la conclusión de la hipótesis es, también, la premisa de la que se parte. Arsuaga ya se había dado cuenta de esto mismo al afirmar que este tema es como la pescadilla que se muerde la cola (Arsuaga y Martínez, 2006).»

    http://medina-psicologia.ugr.es/cienciacognitiva/?p=16

  2. Yagoveloz says

    Olvidan siempre el pescado y los moluscos,crustaceos, huevos de aves etc propios de los sistemas litorales.La hipótesis acuatica salva el círculo vicioso del mono «cazador».Y se presta ninguna atención a la mujer, madre, pescadora,recolectora y transmisora de cultura. Mucha paciencia!

  3. Jose says

    ¿DHA (ácido docosahexaenoico) consumido por las hembras gestantes al marisquear en los litorales? Hipótesis de Crawford.

  4. Eduardo Zugasti says

    David, que la inteligencia humana se ha desarrollado a causa del carnivorismo no es exactamente lo que se dice en el post. Lo que dice el trabajo de Psouni y sus colaboradores es que las diferencias en el destete entre las crías del hombre y las de los simios con toda probabilidad se debe al carnivorismo, ya que es una pauta que aparece en casi todas las especies de mamíferos. Esta es una diferencia puramente biológica, no cultural. La inteligencia social humana tiene claramente otras causas paralelas, pero es difícil no estimar el papel que han podido jugar comportamientos tan socialmente complejos, y que requieren tantas habilidades cognitivas, como la caza en coaliciones. Y sin caza no hay carne. Se sabe que la caza en coaliciones se da sólo en especies con una cognición muy avanzada (por ejemplo, delfines). Estas habilidades para cazar en coaliciones las habría extendido el ser humano a una conducta todavía más «terrible», la guerra, que también desempeña un papel importante en la evolución humana.

  5. El gato de Schrödinger says

    «¿Sigue siendo positiva para nuestra salud una dieta basada en la carne?»

    Desde la revolución neolítica y la progresiva aparición y extensión de sociedades más o menos civilizadas y sedentarias de economía agrícola, la base de la dieta de la mayoría de los seres humanos son los carbohidratos, a través de cereales, fundamentalmente (trigo, arroz, maíz, etc.), con todo el bagaje de enfermedades asociadas.

    Por otro lado, no veo dónde puede estar la inmoralidad de comer carne, a menos que nuestras normas de convivencia hayan cambiado mientras me echaba la siesta. Puesto que la moral es el sistema de normas que mantiene la cohesión del grupo, el hábito de comer carne solo podría ser inmoral en una sociedad o grupo social que tenga proscrito tal hábito.

  6. Eduardo Zugasti says

    Bueno, pues usted no lo verá, pero otros sí lo ven. Resulta que no vivimos en una sociedad moralmente homogenea, sino en una donde hay distintos grupos con criterios morales discrepantes. En el caso concreto de la carne, los que se definen como animalistas creen que su consumo es inmoral y por tanto la sitúan fuera de su «sistema de normas». Por otra parte el tabú de la carne no es que sea algo inaudito, como es sabido, aunque el fundamento del tabú solía ser mítico-religioso. Piensen en los budistas, algunos gnósticos…

  7. El gato de Schrödinger says

    Los animalistas, afortunadamente, no son una secta lo bastante numerosa como para imponernos su código moral y prohibirnos a los demás, los que no vemos inmoralidad alguna en el hecho de comer carne, disfrutar de un buen filete o chorizo.

  8. Eduardo Zugasti says

    Pero el hecho de que los animalistas no sean una comunidad «lo bastante numerosa como para imponernos su código moral» no significa que no representen una posición moral. Además excuso decir que es una posición moral sustentada por algunos filósofos éticos muy influyentes, como Peter Singer, por lo que no es nada estrafalario tomarla en cuenta, sea para seguirla o rechazarla.

  9. alfredo says

    Yo tampoco me siento incumbido sobre los aspectos morales del consumo de carne.Y siempre me molesta que me presionen a base de atribuirse cierta superioridad moral. Los vegetarianos han dado la tabarra durante decenios, aunque parece que van de baja. Y pasa también con los transgénicos, como bien publican ustedes mismos estos días. El ser humano experimenta una necesidad (que merece también muchos artículos) de extender el manto moral cada vez más lejos. Un ejemplo claro es el trato que se le da hoy en día a los animales. a casi todos. A la larga, dejaremos de comer carne de animales. Pero será cuando se haya sintetizado en laboratorio una alternativa potente (y salgan Ferran Adriás a porrillo convirtiéndola en el colmo de la modernidad). Dicen que ya hay una empresa que ofrece una millonada al que tenga la fórmula de un filete que parezca realmente un filete. así todos contentos.

  10. El gato de Schrödinger says

    «A la larga, dejaremos de comer carne de animales.»

    Sí, algún día la humanidad estará compuesta de seres angelicales, que no comerán carne, no dirán palabrotas (bajo sanción), no intercambiarán fluidos corporales (una guarrería propia de homínidos cavernícolas), y proclamarán la Declaración Universal de los Derechos de las Alcachofas.

  11. Eduardo Zugasti says

    Para poner otro ejemplo, yo tampoco me siento incumbido por los «provida» que creen que las células embrionarias son personas, pero asumo que existe esa opción moral discrepante. Ya no vivimos en una sociedad con una moral homogenea, ni siquiera creo que tengamos realmente una «ética mínima», como les gustaba reivindicar a Adela Cortina o Victoria Camps. Hay que aceptar el pluralismo moral como un hecho, creo.

  12. El gato de Schrödinger says

    Sr. Zugasti:

    Si usted fuera médico y trabajara en un hospital, y un paciente suyo menor de edad necesitara urgentemente una transfusión de sangre para no morir, y sus padres, testigos de Jehová, se opusieran a ello porque lo consideran inmoral… ¿seguiría aceptando el pluralismo moral, o le haría una transfusión al menor?

  13. Grunentahl says

    Hay cierta contradicción en reivindicar un modo de vida «naturista», y en consecuencia evitar comer carne, por razones morales. La «Moral» (y su sinónimo la «Ética») no existen en la «Naturaleza»: es un invento humano, relativamente reciente y sobre el que nosiempre hay acuerdo. Salvo en las películas de Disney, ¿puede considerarse inmoral que un tigre se coma a una gacela?

  14. Eduardo Zugasti says

    Precisamente ese ejemplo (me refiero a la pregunta de «El gato de Shrödinger) es una ilustración de que hay, como cuestión de hecho, una pluralidad de posiciones morales. En ese caso la decisión del médico está condicionada no sólo por su opinión moral personal, sino por lo que la ley establece. Pero lo que la ley establece no es «ética mínima», sino norma positiva.

  15. El gato de Schrödinger says

    Claro, Sr. Zugasti, que hay muchas posiciones morales. Nadie se lo ha negado. No es necesario que insista en ello.

    No obstante, tengo entendido que en 1993 hubo un congreso en Chicago, del Parlamento Mundial de Religiones (que cumplía cien años) y allí, al parecer, se pusieron de acuerdo en su reconocimiento de los Derechos Humanos, amén de una serie de vaguedades retóricas, como la paz y la tolerancia.

    Teniendo en cuenta que las religiones son el magma de donde proceden las distintas concepciones morales (aparte, claro, hay otras más modernas, de origen ideológico-filosófico), se podría decir que hay un amago de ética universal en ese mínimo común denominador.

    La idea de una ética mínima es consustancial al iusnaturalismo, que actúa como freno a la concepción positivista del derecho, para la cual el legislador crea los derechos (para los iusnaturalistas, simplemente los reconoce).

    La idea de una ética mínima y universal está en la base de las concepciones filosóficas y políticas liberales. La Declaración Universal de los Derechos Humanos es una expresión de iusnaturalismo. Por contra, el relativismo moral y cultural, así como el positivismo jurídico, son un peligro para la libertad y aliados de las peores tiranías.

    Hay que tener cuidado con eso.

  16. Eduardo Zugasti says

    La mitad de las discusiones en los blogs son peleillas. La otra mitad, inútiles intentos de aclarar malentendidos.

  17. El gato de Schrödinger says

    ¿Quiere decir que me deja por imposible?

  18. Eduardo Zugasti says

    Pero bueno, ya que estamos. No existe ese «mínimo común denominador» de las posiciones morales, en mi opinión. Las declaraciones de «derechos humanos» han surgido en culturas concretas en una situación histórica políticamente definida cuyos verdaderos agentes son en realidad los vencedores de la II guerra mundial. Ni la «humanidad» ni la «naturaleza humana» tienen nada que ver con esto. La ética supuestamente «universal» de los derechos humanos está llena de contradicciones fruto de su situación cultural relativa. Por ejemplo, los países islámicos consensuaron una Declaración de los derechos en el Islam, y esto por no mencionar las sucesivas «generaciones» de derechos cada vez más incongruentes entre sí (por ejemplo, la contradicción entre los derechos individuales y los derechos colectivos). ¿Cuál sería el «común denominador» entre el cristianismo y el Islam, pongamos por caso? Acaso sea su común hostilidad al laicismo…

    La llamada «ética mínima» es un artefacto filosófico en retirada. Es una cosa bienintencionada, que yo creo que en España ganó terreno sobre todo gracias al intervalo de la transición, con sus característicos tejemanejes, pero que actualmente no resiste un mínimo análisis. ¿Cuáles son los contenidos de esa «ética mínima» y de ese «derecho natural»? ¿Quién es competente para determinarlos? ¿El papa? ¿Habermas? ¿Un «comité de ética»? Perdón, pero es que es de risa.

    Constantemente estamos viendo como agentes de posiciones morales discrepantes discuten numerosos contenidos de esa supuesta «ética civil». Las reivindicaciones de los animalistas pueden ser despachadas como irrelevantes, pero ¿qué pasa por ejemplo con las exlamaciones de los obispos contra la homosexualidad o el aborto, contra la «educación para la ciudadanía», etcétera? No hay por donde cogerlo.

    Les dejo un enlace que explica bastante bien todo esto:
    http://eldemoniodelaplace.wordpress.com/2012/04/09/reivindicando-a-protagoras/

  19. Eduardo Zugasti says

    Aqui tienen un ejemplo de «ética mínima» entre el Islam y el cristianismo:

    http://www.acommonword.com/

    Para echarse a temblar. Luego el rey Abdulá se reune con los obispos en Roma para exorcizar ateos. Háblales a estos de «ética civil»…

  20. El gato de Schrödinger says

    Entonces, ¿qué hacemos, señor Zugasti? ¿Vivir al margen de cualquier código moral? ¿Caer en el nihilismo o en el relativismo más absoluto? ¿Adaptarnos al entorno como Zelig? ¿Desarrollar nuestro propio código, duro y cristalino, como Rorschach?

    Una consecuencia inevitable de descartar los principios universales es rechazar el iusnaturalismo (por falta de fundamento), con todo lo que eso podría suponer de pérdida en materia de libertad, justicia, y derechos.

    Puede que sea una ilusión, pero es una ilusión útil, que ha dado buenos frutos.

  21. Eduardo Zugasti says

    Sr. Gato, ningún ser humano que no sea un psicópata puede permitirse el lujo de «vivir al margen de cualquier código moral». Vivir según un código moral es algo totalmente corriente y «natural».

    Otra cosa es discutir, teóricamente al menos, sobre el fundamento «científico» o filosófico de esos códigos. No se trata de hacer doctrinas edificantes sino de intentar describir la realidad lo más correctamente posible. No me parece que sea legítimo hacer una distinción en este punto entre el estudio de la moralidad y otras cosas como el lenguaje, o la religión. Lo que tiene la moralidad de «natural» y de «cultural» es una cuestión empírica en último término.

    Esto sería algo parecido a si usted me reprocha hacer consideraciones ateas sobre el estudio de la religión porque la creencia en Dios en definitivas cuentas es una «ilusión útil, que ha dado buenos frutos».

    Yo soy «ateo» con respecto a la ética mínima, pero también creo que es posible asumir posiciones morales fuertes basadas en la cultura, no en Dios o en la naturaleza. Al fin y al cabo una cultura no es una ilusión.

  22. Eduardo Zugasti says

    Una cita de Carl Sagan que me gusta mucho: «Es mejor comprender el universo como realmente es que persistir en una ilusión por satisfactoria y tranquilizadora que sea». Con el «universo moral» estimo que pasa lo mismo.

  23. El gato de Schrödinger says

    Yo, de puro escéptico, soy escéptico hasta del escepticismo. Y esto no es una boutade.

    Hace unos años habría suscrito sus palabras y las de Carl Sagan, pero ahora tengo otra perspectiva. Lo que me hizo cambiar de perspectiva fue la pérdida de las ilusiones. A veces, un acontecimiento psicológico altera nuestra cosmovisión.

    Ciertamente, la ciencia y la filosofía deben ser capaces de despejar las ilusiones, y ver la realidad a través de ellas. Para eso están.

    No obstante, yo considero que las ilusiones podrían ser como las bacterias. Algunas veces, las bacterias son perjudiciales para nuestra salud, pero en general son necesarias. Mantenemos una relación de simbiosis con las bacterias. Nuestro organismo está plagado de ellas. Las necesitamos para vivir.

    También algunas ilusiones son perjudiciales, porque nos ocultan una realidad que convendría conocer. Otras son necesarias, porque sin ellas la vida se vacía. Sin ilusiones no se puede vivir. Sin ilusiones, uno no se levanta siquiera de la cama.

    El mismo Carl Sagan vivió durante muchos años con la ilusión de entablar contacto con una inteligencia extraterrestre, aunque no hay evidencia empírica de ella (tan solo especulaciones, cálculos de probabilidades, nada sólido). Tampoco Carl Sagan era inmune a la ilusión de la belleza, que él veía en las nebulosas, las galaxias, las ballenas y los lirios del campo. Supongo que tampoco era inmune a la ilusión del amor, a la ilusión de la libertad y del libre albedrío (tal vez lo sean).

    A nivel colectivo, las ilusiones tienen su función, como la tienen a nivel individual. Podemos imaginar una sociedad futura libre de ilusiones, a base de racionalismo extremo, materialismo y escepticismo, pero en caso de llegar a existir, tendría que pagar un precio, y tengo razones para creer que duraría poco tiempo. Me temo que sería eclipsada por sociedades con una cultura más asertiva, más primaria.

    Ahí lo dejo. Mi opinión le podrá parecer extravagante, pero siempre puede recurrir a alguna argumentación contundente para desbaratarla. Tiene usted formación académica en filosofía, de algo le servirá.

  24. Eduardo Zugasti says

    ¿Entonces la ética mínima es una ilusión? ¿El iusnaturalismo de los derechos humanos es una ilusion? Porque si son ilusiones, precipitadas por necesidades psicológicas o urgencias sociales, no se pueden tomar como teorías filosóficas o descripciones científicas serias, tal como pretenden sus promotores. En este caso la discusión pasa a un nivel totalmente distinto. A grandes rasgos este nivel corresponde con lo que Dennett llama «Belief in belief».

  25. Eduardo Zugasti says

    Y por cierto no sé a qué viene empezar a mezclar aquí todo tipo de cosas y calificarlas indiscriminadamente como «ilusiones». Empezamos por la ética universal, pero ahora resulta que también la belleza o el amor son «ilusiones». ¿Hay algo que no sea ilusorio en el universo? El final de este camino es calificar toda la realidad como «Maya» .

  26. maria teresa gimenez barbat says

    Yo creo que sí, que los comentarios en los blogs y cierta necesidad quizá testosterónica (que también compartimos las mujeres) hace que personas que en realidad discrepan poco parezca que divergen de forma importante.

    El amigo Eduardo Zugasti es un simpatizante bastante entusiasta del movimiento humanista secular que, como cuestión fundamental, trabaja en la cristalización de esa ética común para todos los humanos. Y yo lo veo muy compartible con el punto de vista gatuno, que yo (también humanista secular) comprendo perfectamente. La naturaleza no nos va a dar normas ni pautas morales pero su conocimiento nos dirá mucho sobre quiénes somos y cómo hacer posible ese consenso.
    Sobre «ilusiones»…. Bueno, Eduardo también sabe que existen ahora corrientes «místicas» dentro del ateísmo, por ejemplo. Y nada desdeñables. Hay unas necesidades humanas fuertemente ligadas a nuestra naturaleza que impiden vivir en un mundo nihilista y sin valores firmes.

  27. Eduardo Zugasti says

    Es que es una falacia afirmar que las ideas morales no se pueden extender porque sean «culturales». Es justo al revés: precisamente por ser eso, porque se pueden transmitir y aprender, las doctrinas morales o ideológicas pueden extender su área de influencia de un modo similar a cualquier invención material. No es necesario que sean «naturales» en un sentido innatista. A mí me parece que la analogía de la moral con el lenguaje (tal como lo entiende Everett, más que Chomsky) es bastante pertinente en este caso. En lo que no creo que podamos confiar ya es en encontrar un «lenguaje moral de la humanidad» o un «órgano moral» a la Hauser.

  28. Maria cinta says

    ¿Por qué me gustarán tanto los hombres?

  29. Eduardo Zugasti says

    Es raro. Yo tengo la sensación desde hace años de que las mujeres y los hombres cada vez nos «gustamos» menos.

  30. Vaya este tema ha generado una gran polémica, yo considero que es necesario comer carne, creo que el pescado también tiene carne, Jesucristo dijo que era bueno comer pescado, asi que creo que necesitamos de todos estos elementos para vivir, la carne contiene proteinas y carbohidratos que necesitamos los seres humanos ademas se ha demostrado que es buena para el cerebro

  31. Turkesah says

    Nunca antes me había sentido tan ignorante como después de leer esta enriquecedora discusión. Si bien mi opinión, en su generalidad, se inclina a darle la razón a Eduardo Z, no puedo no quitarme el sombrero frente a la aplastante lógica del gato de Sch. Gracias a ambos por este interesante debate.

  32. cati says

    un ecosistema no prodria tener solo carnivoros porque si existiera solo los carnivoros ¿que comerian?

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