Autor: Satyajit Das

Lo que pensar sobre máquinas pensantes nos dice sobre los seres humanos

En su novela El arco iris de gravedad, Thomas Pynchon identifica la confusión sobre el sujeto y el objeto de investigar: «si consiguen que hagas las preguntas incorrectas, no tienen que preocuparse por las respuestas». Pensar sobre las máquinas que piensan plantea más preguntas sobre los seres humanos que sobre las máquinas o la inteligencia artificial (IA). La tecnología permite a las máquinas proveer acceso a recursos, potencia, velocidad y comunicaciones esenciales que hacen posibles la vida y mejores estándares de vida. Las máquinas realizan tareas, especificadas y programadas por humanos. Los tecno-optimistas creen que el progreso está cerca de una singularidad, el hipotético momento en que las máquinas alcanzarán el nivel de una inteligencia mayor que la humana.